Ha llegado hasta mis ojos el conocimiento sospechado de unos hechos inhumanos que se aprecian tras el visionado del programa de canal cuatro televisión emitido el 31 de Enero. El video lo podrá ver al pie.
Las imágenes muestran un trato de todo punto inhumano y unas vejaciones enormes hacia los residentes del centro de Leganés. Son imágenes que nos sonrojan a todos, nos encogen el corazón y se nos clavan en el alma. Al contrario de lo que afirma el director del centro, Don José L. Sánchez, las situaciones mostradas no suponen hechos puntuales sino que son habituales en dichos sitios.
Para nuestra vergüenza y la suya, es evidente que los mecanismos de salvaguarda de las personas vulnerables que habitan esos lugares han fallado. Se hace así necesaria una investigación externa e independiente de la situación vivida.
Todo ello porque existen diversas posibilidades entre las que destaco dos: se pueden silenciar los hechos utilizando la técnica del avestruz o mirando hacia otro lado, y por otra parte se pueden y deben depurar responsabilidades tanto a nivel directo (en el mismo centro residencial), como indirecto (en el resto de centros dependientes del IMSERSO, en el propio ministerio que usted dirige, en el canal televisivo que emitió dicho reportaje, etc.).
De ser ciertas, como se supone, las imágenes que enseña dicho programa no cabe sino esperar ceses, dimisiones, consecuencias políticas y judiciales así como medidas legales adecuadas por quien sea menester. Con carácter urgente se impone que su ministerio comunique a la población española los hechos acaecidos, y que emita sendos informes a la comisión de Naciones Unidas encargada de velar por el cumplimiento de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y a los organismos pertinentes de la Unión Europea. Estos informes deben destacar la eficacia y eficiencia de las medidas adoptadas su departamento.
Además es ineludible su comparecencia en el pleno del Congreso de los Diputados para dar las correspondientes explicaciones.
Lo principal es proteger la integridad física y moral de los que han tenido el coraje de sacar a la luz esta infamia. Su protección y, en su caso, el cierre cautelar del centro de Leganés hasta que se esclarezcan los hechos deben ser prioritarios.
El Fiscal General del Estado también debe actuar de oficio ante situaciones de este calado y gravedad. Diversas denuncias individuales ya han sido interpuestas ante el Fiscal General de la Comunidad de Madrid.
Nota: El programa televisivo donde se ven las degradantes situaciones es el siguiente: