Denuncia ante el Procurador del Común que un colegio de Medina discrimina a su hija por ser muda

Educación rechaza implantar el lenguaje de signos en el centro escolar

Julia Marcos, madre de la menor escolarizada en Medina

CASTILLA Y LEÓN. Julia Marcos Reoyo, madre de una niña de nueve años con una minusvalía del 84% que le impide hablar, ha denunciado ante el Procurador del Común lo que considera «un trato discriminatorio» hacía la menor, ya que su «acceso a la educación y al aprendizaje está siendo vulnerado, puesto que después de más de seis meses de solicitar a la Dirección Provincial de Educación la implantación en el colegio público donde estudia mi hija la lengua de signos lo han denegado sin motivo alguno».

«No entiendo cómo la Junta puede otorgar un recurso a un centro educativo de la comunidad para implantar la lengua gallega y a mi hija la deniegan el recurso del lenguaje de signos en su centro», asegura su madre.

La pequeña Laura, escolarizada en el colegio público Obispo Barrientos de Medina del Campo, tiene diagnosticada una parálisis cerebral que le afecta al área del lenguaje, a la psicomotricidad fina y a su movilidad, por lo que necesita ayuda para realizar sus tareas cotidianas. Además, esta pequeña sufre un retraso madurativo y discapacidad expresiva.

Cada vez menos

Cuando Laura fue escolarizada con cuatro años recibía cinco sesiones semanales de logopedia, que se fueron reduciendo progresivamente, y hoy sólo son dos sesiones de media hora cada una a la semana.

Este año, su madre solicitó al centro escolar un profesor especial para el lenguaje de signos, solicitud que fue denegada por la Junta «sin un argumento», lo que considera «un trato no equitativo» y «un claro incumplimiento de la normativa del propio Gobierno regional».

Patricia González – Foto: F. JiménezFUENTE: NortedeCastilla.es