La línea roja

El otro día en la tertulia casqueril comentábamos un informe que me ha tocado coordinar. La cosa va de evaluar el desarrollo de la ley de accesibilidad al transporte de mi pueblo (Reino, País o Comunidad de las Maravillas); es el castigo que conlleva haber coordinado un informe del Instituto para la Promoción de la Vida Independiente cuando la ley era proyecto.

No hay plazo que no venza y deuda que no se pretenda cobrar. Si otro día escribía a cuenta del “Abismo de Helm” (hueco de separación entre andén y vagón de metro) era porque me llenan el buzón preguntándome cosas como: cómo se puede ir a un sitio, si se va a poner tal cosa en su pueblo, que hay que hacer si te impiden viajar en un transporte…..

Pues bien, después de cotejar con lo legislado, traslado respuestas desoladoras. Si a eso unimos que muchas de las preguntas que formulo, a las administraciones y las empresas de transporte, se quedan sin contestación, o con la respuesta en forma de disculpa y de que la cosa se resolverá cuando lo permitan las disponibilidades presupuestarias….

Por poner un ejemplo. En febrero FGV anunciaba que para final de año habría iniciado las obras para instalar plataformas en los andenes para acceder al vagón en 10 estaciones, pues bien ni una empezaron el año pasado. Y si eso fuera todo… lo mejor es que la ley obligaba a que el 5 de diciembre pasado estuvieran instaladas en todas las paradas en las que confluyan dos líneas de metro o tranvía. Sí, ya sé que a partir de Torrent, Alboraia y la Estación de El Empalme es el “inframundo” para los cascaos y que hasta el 5 de diciembre de 2017 no tendrán derecho a que las paradas de metro y tranvía tengan las plataformas de marras. Solo les cabe esperar que la divina providencia y acaso la solidaridad de sus vecinos y munícipes se ponga a su lado para exigir “a quien corresponda” que acorte su agonía…. Poniendo las plataformas…. No vaya a ser que se piense que estoy dando ideas.

Muestra de pregunta, en este caso a Metrovalencia, que espera respuesta es:

“Soy una persona con movilidad reducida, usuaria de silla de ruedas, que habitualmente utilizo el tranvía.
El acceso al vagón desde el andén resulta peligroso por la diferencia de altura entre vagón y andén y la separación.
Los tranvías de la línea 6 disponen de palas retractiles que suplen la distancia de separación en todas las puertas, pero los de la línea 4 no tienen ningún dispositivo que cubra el hueco y en estos momentos se debe de estar ejecutando el plan de remodelación en los tranvías de la serie 3800 de siemens, que están en funcionamiento desde 1994. En las referencias informativas a esa remodelación se hace referencia a la accesibilidad.
Desearía que me informaran sobre el contenido de esas mejoras, puesto que existen soluciones técnicas que permiten solventar el problema apuntado. A modo de ejemplo me permito señalar la que mejor resuelve el problema apuntado, a mi entender, http://youtu.be/biwWrS14oOA”

Pero volviendo al informe de evaluación la verdad es que las cosas pintan… con pintura invisible. La ley lo deja todo al desarrollo reglamentario y los plazos para hacerlo se han incumplido por parte del Consell con celo y esmero. Y eso que fue de las poquísimas leyes que se aprobó por unanimidad en la pasada legislatura. Pero lo que sí es exigible es que se cumpla lo legislado por el estado en el ámbito de sus competencias y el RD 1544/2007 lo es.

Lo jodido del asunto es que la liamos bien en la tertulia, porque mientras unos hablábamos de que la ley no se cumplía ni en pintura, porque establece en su art. 9 una novedad: la línea roja; que consiste en ponerla en los puntos de cruce con la calzada en los itinerarios peatonales. Vamos lo que son los “pasos de cebra” de toda la vida. Pues bien ni una gota de pintura roja se ha gastado en toda la comunidad; gracias a Dios porque el color de la pintura poco tiene que ver con la civilidad y si no se respeta un paso de cebra o una parada de autobús, habiéndolo aprendido en la autoescuela ¿Cómo se va a respetar una línea que nadie querrá saber que pinta? Pero me iba del asunto, el follón en la tertulia llegó cuando Homero, mi amigo ciego, se incorporó a la tertulia y dijo que de lo que más se oía hablar en las Corts era de la “línea roja” de Fabra.

En fin, el informe saldrá. Por mí, si el Consell quiere obviar la parte de itinerarios peatonales se puede hacer sin remordimiento de conciencia alguno, ya está regulado por la normativa que desarrolla la ley de accesibilidad, la 1/98. Y todo lo que se ahorre en pintura roja reduce el déficit. La cuestión es que el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento. Además los presupuestos deben de atender en primer lugar al cumplimiento de las leyes y en ese punto convinimos que antes de gastarse muestra pasta, FGV, en cerrar la zona de transbordo en la Estación del Empalme (95.000 euros); y la instalación de apertura y cierre centralizado de los edificios de las estaciones en superficie y el control de la iluminación de vestíbulos y andenes (dos hay por 37.000 euros y 10 licitados por 315.000) y otros gastos a los que ninguna ley obliga, está el atender a lo mandatado en la ley de accesibilidad al transporte y luego ya se puede disponer para todas las necesidades y ocurrencias.

La economía es la ciencia que estudia la aplicación de recursos escasos susceptibles de usos alternativos, con la mayor eficiencia posible. Por consiguiente, en cuestión de la remodelación de tranvías unidireccionales de la línea 4 (dan la vuelta a final de recorrido y solo tienen puertas por un lado) sobre la instalación de dispositivos que salven el hueco con los andenes, preferiblemente con rampa extraíble similar a las que tienen los autobuses urbanos, que descansan en la calzada y evitan las sacudidas que las paletas extensibles de los tranvías de la línea 6 producen, y tanto bien hacen a los motores de las sillas de ruedas y las cervicales de quienes las montamos. Eso es dar sacudidas y no lo del toro mecánico.

Lo jodido es que cuestiones que no cuestan un maravedí no se han acometido, por ejemplo el reglamentar sobre el modo y manera de que las personas con movilidad reducida suban y bajen de los autobuses por la puerta que deseen, o el conductor estime como mejor por la visión que pueda tener. Homero, que esa tarde estaba sembrao, dijo que eso no se iba a tocar porque no se maneja gasto y no se puede trincar en comisiones. Remató la faena cuando dijo que las cuestiones de accesibilidad no se cumplían porque en el Consell no había ningún Arquitecto Técnico . Todos lamentamos no poder valernos para darle la vuelta al ruedo después de la tarde que nos regaló.

En fin, que eso de la línea roja está dando mucho juego y el futuro que pinta el informe no es precisamente verde, porque en las cuestiones de cascaos siempre se saltan todas las líneas rojas. En el roscón de la recuperación económica, el haba nos la han dado a los cascaos en la tradicional enmienda a los presupuestos de la Generalitat, van dos y no hay dos sin tres.

De lo único que me alegro es que hoy no hayan pasado por casa SSMM los Reyes Magos. ¡¡ Seguro que este año se hubieran llevado algo !!

Valencia, 6 de enero de 2015