«Permitir el aborto indefinido por malformaciones es una clara discriminación»

Portavoz de la ONU para la Discapacidad

Ana Peláez, vicepresidenta del Comité de la ONU de Derechos de las Personas con Discapacidad [Clic para ampliar la imagen]

La pasión de esta mujer por el trabajo que hace lo convierte prácticamente en un hobby. Así, lleva casi 20 años dedicada en cuerpo y alma a la lucha por la igualdad social de las personas con discapacidad en España y en el extranjero.

Acostumbrada a simultanear estudios desde joven, compagina su actividad en la ONCE -como directora de Relaciones Internacionales y como vicepresidenta ejecutiva para América Latina- y en el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) -como presidenta de la Comisión de Mujer y comisionada de Género ante la UE- con su labor en ONU.

El pasado 22 de febrero fue nombrada vicepresidenta del recién creado Comité Internacional de Defensa de los Derechos de las Personas con discapacidad, con sede en Ginebra. En 2010 ocupará la Presidencia, cargo para el cual ya llevará mucho trabajo adelantado.

En una entrevista con EL MUNDO, Ana Peláez explica cómo echa a andar este órgano de nueva creación en este primer año de vida y los retos que se le plantean. Pero también aborda la situación de la población con discapacidad en España, los retos que se le presentan al Gobierno para armonizar la legislación a la Convención de los Derechos de Personas con Discpacidad de la ONU, la ya existente y la que está por hacer.

«Concretamente, en estos días al tejido asociativo de la discapacidad le preocupa enormemente el proyecto de reforma de la regulación del aborto porque constituye una clara discriminación hacia las personas con discapacidad, que no puede darse en una sociedad como la nuestra», puntualiza.

«Me refiero a los supuestos que van a posibilitar practicar un aborto indefinidamente si el feto presenta malformaciones o enfermedades graves incompatibles con la vida», añade.

Peláez, especialmente dedicada en su actividad nacional e internacional a la vulnerabilidad de la mujer y los niños con discapacidad, apunta que «la práctica el llamado aborto eugenésico» sin límites es «discriminatoria por conceder menor valía a la vida de una persona que probablemente llegue a tener una discapacidad».

La entrevistada insiste en aclarar que ni entra ni sale a valorar el derecho al aborto y sus razones personales «Cada uno tiene derecho individual a decidir lo que quiera», dice. «Pero, si vamos a ley de plazos, hay que meter en esos plazos a todo el mundo«, añade.

Y le lanza un mensaje al Gobierno: «Que piensen bien cuántas semanas quieren y que lo hagan, pero que no saquen la discapacidad y digan: Si tiene discapacidad, en cualquier momento, por la puerta rápida».

El Ministerio de Igualdad anunció la pasada semana que se reunirá próximamente con el Cermi, que defenderá, entre otras cosas, lo expuesto aquí por Ana Peláez.

Paloma Díaz Sotero – Diego Sinova. 22/03/2009. FUENTE: ElMundo.es